jueves, 20 de mayo de 2010

LA RUMBA



Todavía hay autores y aficionados que se resisten a considerar a la rumba dentro del arco de géneros flamencos; pero han sido tantos y tan buenos los artistas e intérpretes flamencos que han cultivado este estilo que no hay más remedio que rendirse a la evidencia e incluirla dentro del campo de los estilos festeros junto a las bulerías, las alegrías, los tangos, etc.


Rumba de discoteca



Lo que ha pasado es que, a partir de los años sesenta del siglo pasado, proliferaron los grupos y artistas rumberos y han convertido a este palo en demasiado popular. Su ritmo es una constante invitación al baile y ha sido llevado a las discotecas, ferias, romerías y demás festejos, haciendo las delicias de los jóvenes y no tan jóvenes. Este exceso de popularidad no gusta a los aficionados cabales.

La rumba flamenca es de origen afrocubano. Parte de la disolución de ciertos elementos de la guaracha que se funden con otros procedentes de los tangos flamencos con un compás más acelerado y revolucionado. Como cante para escuchar es poco interpretada en las primeras décadas del siglo XX.

Parece ser que su origen puede estar en Cádiz donde aparecen los primeros rumberos flamencos: José Ortega el Gordo, Diego Antúnez y Pepa Oro. Después grabarán rumbas Pepe de la Matrona, la Niña de los Peines, Bernardo el de los Lobitos, Manuel Vallejo, Canalejas, Angelillo y el Cojo de Huelva. De esa época (1.914) es "Recuerdos de la Habana" grabada por Pepe de la Matrona y todo un ejemplo de rumba flamenca con palmas, jaleos, ritmo y guitarra (Manolo el Sevillano)




XXX. PEPE DE LA MATRONA. Rumba de 1.914.
XXX. Guitarra: Manolo El Sevillano.




En los años sesenta del siglo pasado, junto a El Chaqueta y Chano Lobato, surge la figura de Miguel Vargas Jiménez (Utrera, Sevilla, 1.940 - 1.999) que con su "Bambino Piccolino" entusiasmó a gran número de aficionados, lo que le valió el nombre artístico de Bambino, convirtiéndose en uno de los artistas más demandado e inspirado de la década de los setenta del siglo XX y cuyas rumbas y bulerías se siguen imitando hoy en día.


Casi al mismo tiempo y sin que hubiera relación entre ellos, surge la rumba catalana con Peret y Antonio El Pecailla en Barcelona y la rumba urbana callejera de Los Chicos en Madrid con sus más de 17 millones de discos vendidos. Manzanta, Ketama y gran parte de los grupos rocieros graban su propias rumbas.

Kiko Veneno
compone su "Volando voy", que se encargará de popularizar Camarón, intruduciendo acompañamiento de guitarra y bajo eléctricos, teclados y bongós cubanos que le acercarán más al ritmo antillano que al flamenco. Las Grecas serán la semilla de un nuevo pop-rock de inspiración flamenca. Y por último, José Torregrosa y Paco de Lucía componen el que sería uno de los temas flamencos más escuchado de todos los tiempos: "Entre dos aguas" rumba para guitarra.




2 comentarios:

La Gaceta Flamenca- Ramona dijo...

Si se han aceptado al flamenco los cantes de ída y vuelta ¿por qué no aceptar la rumba?

Pedro Delgado dijo...

¡Eso digo yo!